En medio de las crecientes preocupaciones sobre las enfermedades que se vuelven resistentes a los antibióticos, las sustancias del orégano podrían desempeñar un papel en la lucha contra las enfermedades que ya no responden a los antibióticos. Agregar hojas frescas de orégano o aceite a su dieta diaria puede ayudar a estimular el sistema inmunológico. Varios estudios revelaron que un gramo de orégano tiene 42 veces más propiedades antioxidantes que las manzanas, ya que es rico en vitamina A y C. La ingesta de hierbas como el orégano puede contribuir significativamente a la ingesta total de antioxidantes vegetales y puede ser una fuente aún mejor de antioxidantes dietéticos que muchos otros grupos de alimentos como frutas, bayas, cereales y verduras. "El orégano ayuda a mejorar la funcionalidad del metabolismo, por lo que el cuerpo permanece rejuvenecido y energizado todo el tiempo. Aumento de la circulación sanguínea, gracias a la presencia de minerales como el hierro, ayuda a oxigenar las células y los músculos de nuestro cuerpo, lo que nos da energía y fuerza.